dijous, 12 de desembre del 2013

LECTURAS PARA TRANQUILIZAR LA MENTE


Quería incidir sobre el tema de la escritura como terapia, porque a veces se dan coincidencias que hacen que lo que tú has pensado que puede ser bueno, venga alguien entendido en la materia que te ratifique de que estás en lo cierto.

Digo esto porque estoy asistiendo a un taller de memoria por recomendación del Neurólogo,  “todas y todos sabemos la importancia que los problemas neurocognitivos tienen en estas enfermedades”, lo cual nos obliga a buscar recursos que puedan ayudarnos a paliar este para mí importantísimo problema, es muy triste ver como día a día va disminuyendo la memoria, poder de concentración, atención etc...Etc".

El caso es que la pasada semana asistí a una charla sobre el sentido que tiene asistir a un taller de lectura y sus contenidos básicos, e incidían mucho en la importancia de encontrarle sentido a lo que leemos ya que la oferta de libros es tan amplia que no tiene sentido empeñarnos en leer cosas que se nos atragantan y que no nos permiten disfrutar lo que estamos leyendo; también decían que es de suma importancia el tener comprensión lectora, para ello decían es necesario situarte en el lugar en el que se desarrolla la acción y que tiene que ser como si la viviéramos, y es aquí donde entra nuestro problema, que quizá somos devoradores de libros, artículos de opinión, reportajes etc.. Pero al tener dificultad para memorizar lo que leemos, no disfrutamos de la lectura ya que terminamos de leer y no recordamos lo que hemos leído, lo cual produce una gran insatisfacción.
Ahora, aunque no es fácil, intento elegir sobretodo lecturas que me ayuden a sentirme más calmado, alternando con algún libro de actualidad, o bien con alguno que tenga buena crítica, aunque la buena crítica no siempre coincide con el gusto de quien lo lee, pero sobretodo y lo más importante es leer despacio y si es necesario,  releer párrafos que nos resulten interesantes.

Quiero anteponer que yo no soy un experto en nada, yo solo pongo mi experiencia personal y es decir, que a mí me está ayudando mucho a disfrutar de la lectura, a pesar de que mi memoria deja mucho que desear.